La bajada del caudal del Tajo deja al descubierto un paisaje de basura
Toallitas, compresas y bolsas se acumulan en las riberas junto a la carretera de La Puebla tras el descenso del nivel del río
La retirada de las
aguas del río Tajo tras las últimas lluvias ha dejado al descubierto una imagen
preocupante a la altura de la carretera de La Puebla, en las inmediaciones de
la finca Daramezas, en el término municipal de Guadamur (Toledo). Vecinos de la zona han alertado de la aparición de grandes cantidades de
residuos como toallitas higiénicas, compresas y bolsas de plástico,
esparcidas y amontonadas a lo largo de las riberas.
Los restos quedaron
atrapados en las ramas bajas de los árboles durante la crecida del río, cuando
el caudal sumergió parte del entorno vegetal, transformando las ramas en
auténticas redes que retuvieron todo tipo de desechos. Ahora, con la vuelta a
la normalidad en el nivel del agua, la acumulación de residuos es visible y
alarmante.
“Es asqueroso y
repugnante”, denuncian los vecinos, preocupados
por la degradación del entorno natural y por el impacto ambiental que suponen
estos residuos no biodegradables. La situación reabre el debate sobre el uso de
productos que no deberían ser desechados por el inodoro y sobre la falta de
concienciación en torno a la contaminación fluvial.
Mientras tanto, el
Ayuntamiento de Toledo ha comenzado trabajos de limpieza en otros tramos del
río, retirando más de 150 metros cúbicos de escombros en las riberas,
una acción que podría extenderse a esta zona afectada de Guadamur si las
denuncias vecinales se mantienen.
La escena, registrada
también en vídeo, refleja la urgencia de medidas de control y educación
ambiental, así como la necesidad de sistemas de saneamiento más eficientes
que impidan la llegada de estos residuos al cauce del río.
Comentarios
Publicar un comentario